¿Os acordáis de Bilal y su increíble historia? Aquí tenemos la segunda parte.
Este estudiante (21 años, La Rioja) de Go Study lo ha vivido todo en Australia. Desde estar hospedado en una casa alucinante en primera línea de playa, en una casa árbol en las Blue Mountains... Nos sigue contando sus aventuras.
7. ¿Cuál era tu nivel de inglés al aterrizar en Australia? ¿Ha mejorado? ¿Cómo ha sido la evolución con el idioma?
Esta parte es muy divertida. Mi nivel era teóricamente un B2, un nivel avanzado. Sin embargo ni la gente entendía mi magistral pronunciación ni yo entendía el acento de la gente. La parte graciosa era esa, la parte no tan graciosa era cuando en las conversaciones no tenía participación alguna, la gente se reía y no terminaba de cogerlo. No obstante, eso fue cambiando poco a poco y, cuando ya dejé de ser consciente de ello, podía hacer reír a toda la mesa mientras cenábamos.
Parece una chorrada, pero es una enorme satisfacción, puedo decir que hablo inglés, especialmente cinco meses después de que iniciara este viaje. Estoy escribiendo desde Kuala Lumpur, con destino a Sydney (otra vez sí) pero ¿quién no volvería en su sano juicio?
Será la brujería del viajero que visita Australia. Hace unas horas dejé Tailandia (estancia de 21 días), dónde conocí a toda clase de viajeros y mantuve toda clase de conversaciones, algunas extraordinariamente profundas, que marcarán un antes y un después. Y esto amigos, no habría sido posible el día que llegue a Australia. Mi nivel no es el mismo, ahora no hay conversación que no pueda mantener y, si vienes a Australia, estás ya condenado a dominar esta lengua, éxito inevitable en este aspecto ;)
8. ¿Cómo definirías a Australia como país para vivir?
Los australianos trabajan para vivir y no viven para trabajar, e
s gente que viaja mucho, que disfruta de la vida en general. La gente es muy feliz y todo funciona muy bien.
Melbourne, según ciertos estudios, es la ciudad con mejor calidad del mundo, Sydney también está en el ranking. Además de toda la gente que conozco prácticamente todos quieren quedarse, y eso en sí debe decir mucho.
9. ¿Estás probando cosas nuevas? ¿Has hecho surf? ¿Has disfrutado de alguna barbacoa en la playa? Cuéntanos cosas curiosas/inusuales que hayas hecho o te hayan ocurrido.
No he hecho surf, me regalaron una tabla que a su vez regalé a una persona que ama el surf, no obstante ahora que viene el buen tiempo no tendré excusa para iniciarme. En cuanto a las barbacoas, llegué en invierno por lo que no tuve ninguna, aunque no es justificación y ahora que vuelvo en verano será requisito semanal.
En cuanto a si he hecho cosas inusuales, dejaré a un lado todo el contacto que he tenido con los marsupiales y esas cosas porque es muy usual aquí. El primer mes me lo tomé con mucha calma,
estuve viviendo al sur de Sydney en un penthouse en primera línea de playa con un amigo que conocí. Tenía una gran colección de tablas de surf, trajes de neopreno, una bodega de vinos, en verdad no faltaba nada en esa casa, por no hablar de la tecnología. Fue una vida de ensueño, estuve bastante tiempo solo pero no hablo más de ello que es duro recordar tiempos tan buenos. Esta podría considerarse la primera cosa inusual. No me quedé porque tenía una hora de ida y otra de vuelta al centro de Sydney de lunes a jueves. Valió la pena pero ya era suficiente, además ya quería dejar al chico tranquilo.
Poco después
conocí a una persona que estaba construyendo una comunidad de casas árbol en mitad de las Blue Mountains, en un sitio remoto, donde no había señal alguna. Las estrellas, qué decir, eran espectaculares. Estuve ahí como una semana, aprendí un poco cómo funcionaba el diseño de ese sitio y ayudaba en lo que podía. Lo demás era relajarse y disfrutar de la naturaleza.
Recuerdo durante mi primera mañana, estaba desayunando y se posó un pajarillo de colores en una ramita a lo alto, pero como pendiente de mí, pensé: “Igual si le ofrezco comida, baja… nada… olvídate, sabes que eso es imposible, es un animal salvaje”, la cosa es que me senté en el suelo y el pajarillo se acercó y comenzó a comer de mi mano. Y a la mañana siguiente estaba ahí esperando de nuevo. Era mágico. Éramos tres personas en la comunidad, un alemán y su padre (muy mayor) y yo. Mi casa árbol estaba situada como a unos 100 metros del más cercano de ellos. Creo que nunca dormí tan bien, hacía muuuuuuucho frío fuera, yo en mi casa árbol con mis velas, mi estufa, esa ausencia total de sonido. Dios, que momentos tan mágicos. El despertar en alguna de las mañanas con petricor, el famoso olor de la tierra mojada (tiene nombre sí).
Cuando me tenía que duchar, tenía que adentrarme en el bosque donde había una ducha con agua caliente, autosuficiente, como toda la comunidad, no me creía lo que estaba viviendo.
Recuerdo que horas antes de llegar a mi casa árbol
me invitaron a una fiesta en algún lugar recóndito en el norte de Sydney, en mitad de la nada, bajo las estrellas, alrededor de un fuego. Éramos alrededor de 50 personas de todas partes. Todos traían comida, y la posaban sobre una mesa, y lo compartíamos libremente, bailábamos alrededor del fuego, al final de la noche la gente contaba historias, tocaba instrumentos, cantaba, meditábamos. Algo muy extraño es que aquí, en mitad de la nada, al otro lado del mundo, entre tan poca gente y con una probabilidad tan nula… Bueno que conocí a una chica de Logroño (250.000 habitantes). Qué posibilidades había de que sucediera eso. Lo mejor fue cuando se le iluminaron los ojos cuando dije que era de Logroño. "¡VENGA YA!" Cosas que nos pasan a todos…
Recuerdo la noche en la que subí con una amiga al Tower Eye de Sydney, salíamos de clase, con unas pintas… La cosa es que hablé con el de seguridad y nos dejó subir y estar un rato, aparte de ser muy caro, es bajo reserva. Se me taponaron los oídos subiendo por el ascensor, es la única queja que tuve.
Aprendí a tocar el piano durante mi último mes antes de venir a Tailandia, en ese momento vivía en pleno centro, y he de decir que era muy cómodo para lo que pensaba que era vivir en el centro de una ciudad tan grande. Las noches por el centro de Sydney eran muy tranquilas, salvo alguna zona concreta como King Cross.
Alguna noche simplemente me perdía por el Harbour Bridge con mi amiga, o bien me iba con amigo un peruano a dar un paseo en
porsche por el centro o por la zona de la Opera.
Estas fueron algunas de las vivencias más inusuales que tuve, seguro que me dejo algo, además soy una persona exigente y hubo un momento en el que dije, hora de ponerse con proyectos, y se acabó la magia. Sin embargo la magia volvió en Tailandia y probablemente siga en este verano de Sydney y en esa navidad en la playa y ese fin de año en Australia que aún no conozco. Además en principio tengo un
road trip pendiente en unas semanas hacia el norte por toda la costa este. Ya va siendo hora de conocer Australia.
10. ¿Está mereciendo la pena tu aventura y compensa el crecimiento personal que se vive?
Muchas gracias nuevamente a Inma, por maximizar ese deseo, sé que era tu tarea pero me da igual. Muchas gracias por ser parte de lo más especial que he hecho hasta ahora en mi vida.
11. ¿Has hecho turismo? ¿Qué es lo que más te ha gustado de lo que has visto hasta ahora en Australia?
En verdad solo he estado en Sydney, no obstante es hora de cambiar eso.
12. ¿Qué es lo que más echas de menos de España? ¿Y lo que menos?
A mi familia, a mis amigos, la comida (aunque aquí me preparan auténticas delicias de todas partes). Esta respuesta puede parecer muy obvia y simple, pero querido lector, cuando estés aquí lo entenderás. Just do it mate. Make it simple.
Y esta ha sido parte de mi experiencia, chicos, honesto en todo momento, sin deciros y seguramente me haya quedado corto, debí escribir esto cuando estaba tan emocionado como cuando lo viví, espero que os haya gustado. Después de llegar aquí siento que puedo hacer lo que quiera e ir adonde quiera (esto es curioso, pero lo predije, y te pasará a ti también).
Aunque no he sido muy activo en las redes sociales, os dejo mi Instagram donde podréis seguir mi actividad, que espero sea muy activa pronto. Por supuesto me pueden preguntar cualquier cosa sin compromiso alguno, estaré más que encantado de ayudarte. @bilalsenhior.
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(RECUERDA LA PRIMERA PARTE DE LA AVENTURA DE BILAL EN AUSTRALIA)