Hace tan solo tres meses que llegué a Sydney y la verdad es que para mí esto es un paraíso….. Las dos primeras semanas las dediqué a la búsqueda de piso, situarme en la escuela y empezar a tener un poco de vida social. Pero la vida aquí es muy cara y enseguida me puse a buscar trabajo, aquí empezó mi verdadera aventura. Preparé mi curriculum enfocado a encontrar algo en un restaurante como camarera o ayudando en la cocina, me daba lo mismo solo quería encontrar trabajo. El primer sitio en el que entré me llevé el chasco de mi vida, entré en un restaurante de habla hispana y el dueño me quitó todas las ilusiones que yo tenía. Me dijo que con el inglés que tenía nunca iba a encontrar trabajo, que qué pretendía….en fín una mala persona. Yo desesperada hablé con mis amigos que por suerte son australianos y me dijeron que eso no era lo normal, que no me preocupara. Así que reemprendí la búsqueda de trabajo. No os lo podréis creer he acabado trabajando en una fábrica de chocolate, una autentica perdición. He tenido la gran suerte de tener unos jefes súper majos, ellos solo quieren que los trabajadores no sintamos a gusto en nuestro trabajo y que las cosas sean fáciles y salgan bien. Si tú cumples con ellos nunca tendrás problemas. Desde un primer momento comenté que solo podía trabajar 20h semanales, ya que por desgracia en España no tenemos el Working Holiday Visa, y ellos encantados. Solo tienes que hablar las cosas, eso es mucho más fácil de lo que muchas veces nos pensamos. Algunas veces he tenido que cambiar mi horario por temas de la escuela y han sido siempre muy comprensivos. El tema económico no me puedo quejar, te pagan cada dos semanas y la verdad es que el sueldo está muy bien. Lo malo es que el nivel de vida aquí es bastante elevado y en muchas ocasiones tienes que hacer las mil y una para poder tirar con todo para delante. Pero bueno te compensa el vivir en esta ciudad, aprender muchísimo de toda la gente que te rodea y vivir una experiencia única.
Si tu quieres trabajar encuentras trabajo rápido, solo tienes que estar abierto a realizar trabajos que quizá en España no harías pero aquí es distinto. Quizá en el sitio menos pensado encuentras a la persona que te puede ofrecer un trabajo mucho mejor o más enfocado a lo que has hecho en España. La gente es muy abierta y enseguida hablan contigo, se interesan por tu situación, y si pueden te ayudan. Aquí no eres un simple camarero o un inmigrante aquí realmente te ven como una persona. Genial!!! Es más tenemos que aprovechar que están locos por aprender español y les encanta conocer gente española. Así que no podemos perder esta oportunidad!
Os animo a todos a que vengáis!